El Servicio de Diagnóstico por la Imagen del Hospital
de la Reina trabaja en colaboración directa con todos los especialistas del
Centro Hospitalario para ofrecerles aquellas pruebas complementarias que precisen,
con el fin de obtener el diagnóstico más adecuado.
Entre las más habituales destacan:
RADIOGRAFÍA:
Es la prueba más habitual y la primera que se
realiza para descartar la presencia de lesiones sobre todo en el tratamiento de
una urgencia.
Habitualmente la radiografía es más conocida por
su uso en el diagnóstico de lesiones óseas (fracturas, fisuras…).
ECOGRAFÍA:
Su uso más frecuente es la detección de lesiones musculares, ya que
este tipo de prueba aprecia de una manera muy fiable posibles daños en las
partes más blandas del cuerpo. Por ello también se utiliza para ver la función
de los órganos del abdomen.
La ecografía se basa en el uso de ultrasonidos,
por lo que resulta inocuo para el paciente al no emitir ninguna radiación. Tanto es así que es el método que se utiliza
para realizar la visualización del feto en el embarazo, creando imágenes en 3D
y 4D del bebé.
TAC
(también conocido como Escaner):
Es una prueba que al igual que la radiografía se
realiza a través del uso de radiación, obteniendo en este caso múltiples
imágenes de rayos x que se combinan para generar una visión más detallada de la
parte que se está explorando. Si además se le añade un contraste se puede
explorar la función de los distintos órganos.
RNM
(Resonancia Nuclear Magnética):
La resonancia magnética nuclear permite obtener
imágenes detalladas del interior del cuerpo desde cualquier perspectiva,
aportando información sobre patologías que no pueden verse con un TAC o una
ecografía. Se utiliza para diagnosticar multitud de lesiones: de columna,
médula espinal, cerebro, corazón, pulmones, riñones, tendones, ligamentos..
Se basa en el procesamiento de ondas de radio que
pasan por el paciente, el cual es sometido a un potente campo magnético. A
diferencia del TAC o
de las radiografías simples no usa radiaciones ionizantes (rayos X).
Se trata de un tipo de radiografía específica para
la mama. Las imágenes que recogen pueden mostrar pequeños tumores que no se
pueden sentir. Las mamografías también pueden mostrar otras irregularidades en
la mama.
Existen dos tipos de mamografía:
. Mamografía de detección.
Esta prueba busca el cáncer de mama en las mujeres sin síntomas. El
objetivo es detectar la enfermedad en forma temprana, cuando puede ser más
tratable.
. Mamografía
de diagnóstico. Es
posible que reciba esta prueba para dar respuesta a una pregunta específica o
para obtener más información sobre un síntoma específico. Se puede recomendar
por los siguientes motivos:
- -Una mamografía de detección muestra un área sospechosa.
- -Usted siente una masa en la mama.
- -Usted tiene otros síntomas inusuales.
La mamografía de diagnóstico normalmente toma más
fotografías de la mama que una mamografía de detección